viernes, 30 de mayo de 2008

NACE EL MAESTRO ENCINAS

INSTITUTO DEL LIBRO Y LA LECTURA
INLEC DEL PERÚ

30 DE MAYO
CONMEMORACIÓN


PLAN LECTOR
PLIEGOS
DE LECTURA

AQUEL
MAESTRO
EGREGIO

Danilo Sánchez Lihón

1. El amor bondadoso
Una antigua leyenda cuenta que cuando el sabio y virtuoso Rey Salomón murió los demonios hicieron lo indecible por llevarlo al Infierno y verse así favorecidos por su sagacidad y reciedumbre.

Al poco tiempo de tenerlo secuestrado estos lo sorprendieron midiendo el largo y el ancho del lugar y le preguntaron qué estaba haciendo.
A lo que Salomón respondió: “Estoy midiendo el lugar en que habré de edificar el templo de Dios. Y entonces los diablos lo echaron del Infierno.

José Antonio Encinas así como el Rey Salomón adonde iba erigía un templo, el templo de la escuela, de la educación, del saber y de la virtud.

De allí que las tiranías y las corruptelas de la época no podían soportarlo y le hicieron padecer 20 años de sucesivos destierros.

Con él y para él se podría asumir este proverbio que reza así:


El hierro es fuerte,
pero el fuego lo derrite.
El fuego es fuerte,
pero el agua lo apaga.
El agua es fuerte,
pero las nubes lo evaporan.
Las nubes son fuertes,
pero el viento se las lleva.
El viento es fuerte,
pero el hombre lo vence.
El hombre es fuerte,
pero el miedo lo derriba.
El miedo es fuerte,
pero el sueño lo vence.
El sueño es fuerte,
pero la muerte lo es más.
Pero el amor bondadoso
sobrevive a la muerte.

Solo quien tenga y ofrezca amor bondadoso es quien puede alzarse como senda y camino. Porque se puede ser inteligente, y Encinas lo fue, pero no alcanzaremos con ello a ser horizonte. Podemos ser valerosos, y Encinas lo fue, y tampoco con ello alcanzaremos a ser ruta y destino.

Es el amor bondadoso, que él sintió por el niño, por la juventud, por la escuela, por el maestro, por el indio y por el Perú, el que lo hace sobrevivir y el que hace que nos llegue su obra y su figura como un aire puro y fértil para seguir bregando.

Convencidos y esperanzados, por redimir los sufrimientos de nuestra sociedad; y para forjar, a partir de la educación, la patria hermosa que nos merecemos, y la dignidad y felicidad del hombre, que es nuestro anhelo y pleno derecho ahora y siempre sobre la faz de la tierra.


2. Variados y diversos aportes
Muchas son las acciones, tareas y programas, como también son variados y diversos los aportes conceptuales, doctrinarios e ideológicos a la educación, hechos por el maestro José Antonio Encinas, y que cada día vemos que suscitan el mayor interés de los maestros del Perú, haciéndose más claros, actuales y vigentes.

He tenido la oportunidad de constatar cómo se tornaban tan reales y eficaces diversos aspectos y temáticas señalados y precisados en los postulados de aquel maestro, como también de evocar y recrear sus magistrales enseñanzas.

De todos aquellos asuntos y contenidos los que con frecuencia e interés se aluden en las reuniones magisteriales, referidas a la vida y obra del maestro José Antonio Encinas, cuatro son los que resaltan con mayor énfasis, cuales son:

a. El bien y el significado de ser maestros.
b. La integridad moral del maestro Encinas.
c. Su postulado e ideario de la Escuela Social, y
d. Una Educación con identidad.
Estos temas sobresalen entre otros que no dejan de ser importantes, tales como el aprecio, la admiración y hasta fascinación que él sentía por los niños, su recio y valiente activismo en contra de todas las dictaduras que le tocó padecer: Leguía, Sánchez Cerro y Benavides, su visión de la escuela como un lugar de encanto, magia y alegría, su tesis a fin de desterrar los exámenes en la escuela y en el sistema educativo, entre muchos otros.
Sin embargo, en este breve repaso sólo nos referiremos a aquellos cuatro ejes de pensamiento, emoción y acción que hemos aludido como los más representativos y frecuentes en la evocación del autor de Un ensayo de Escuela Nueva en el Perú.


3. El bien y el significado de ser maestro
José Antonio Encinas nos enseña, en primer lugar, a ser maestros de alma, auténticos y consagrados, a cumplir y valorar el privilegio de ser guías, orientadores y amigos de los educandos, teniendo presente en todos los actos de la vida la actitud noble, protectora y de una entrega total al cuidado de la niñez y de la juventud.

Él es el modelo por excelencia de un maestro por antonomasia, en quien se resumen todas las virtudes como también los actos de verdad y valor. Quien, sobre todo, en cada momento de su vida jamás dejó de ser y actuar como maestro.

Elegido Rector de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, en 1931, venciendo en justas electorales a nada menos que a don Víctor Andrés Belaúnde, después Presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, ¿qué blasones lucía Encinas, quien ni siquiera era docente de San Marcos? Exhibía el más honroso título en el contexto que hablamos: el de maestro de Escuela Primaria, o normalista, como se le llamaba entonces.

Y con ello es lo mismo a decir: entusiasmo, sapiencia y gusto rayano en la pasión, que es el rasgo y a la vez el centro de la magia de ser maestros. Y todo ello para entonar muy en alto el canto a la vida, siempre en la perspectiva de búsqueda y hallazgo de verdades trascendentes.

Ser maestro es participación, avivamiento y alegría; ganas de vivir, de celebrar la vida, de asumir la realidad con optimismo y valor. Es forjarse una honda identidad; es usar las manos para pensar y construir; es edificar y transformar la realidad; es hacer de la vida un canto, un himno, una epopeya; una proeza en donde la relación maestro alumno más que lección o enseñanza es diálogo, amistad y comunión profunda.

Él en todos los actos de su vida tuvo el concepto más alto de lo que era ser maestro de escuela, de allí que fue capaz de hacer una educación con altivez como también con gracia, humor y el don de sonreír; de hacerse amigos, de confiar en los demás y en nosotros mismos.

Para hacer todo ello se requiere ser un hombre que ame ser maestro y un maestro que ame ser niño, joven o adulto con ideales; capaz de mirar con los ojos que el niño mira y abrir su alma de la manera cómo él la abre y vuela.

4. Un ejemplo de integridad moral
José Antonio Encinas fue un hombre honrado. De una limpieza moral sin tacha. Por ejemplo, con una exactitud muy grande en el manejo del dinero, con desprendimiento para ayudar y generoso para proteger.

Siendo austero en sus gastos, se enteraba de un problema que sufriera una persona, o lo padeciera su pueblo, y ahí estaba presto él para socorrer.

Así, una vez se dañó el motor que proveía de luz eléctrica a Puno y no se tenía fondos para repararlo. Enterado del asunto inmediatamente giró de sus ahorros el dinero necesario para que se adquiriese la pieza que se había dañado. Hechos como éste constituían la rutina en su conducta.

Sin embargo, era muy escrupuloso con el dinero ajeno y principalmente con lo que correspondían a ser fondos públicos, considerando que este era un bien común, propiedad del Estado y del pueblo doliente y sufrido como es la situación que caracteriza al Perú.

A fin de graficar cómo era respetuoso y estricto en este aspecto, basta referir un hecho: Después de levantarse la clausura que pesaba sobre la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, fue a su casa el administrador con un fajo de papeles a decirle:
– Doctor, aquí están sus cheques para ser cobrados.
– ¿Cómo? –respondió él– si yo no he trabajado durante todo este tiempo.

El administrador le explicó que la partida estaba girada; y que ya todos los profesores y empleados habían cobrado. Entonces el concluyó:
– Sí, pero yo no lo haré. Sólo puedo cobrar cuando he trabajado.

Y ordenó:
– Devuélvase ese dinero al tesoro público.

Pero no sólo veía desde él, sino desde la perspectiva de la otra persona. Así: Logró recuperar una legítima propiedad que había sido usurpada a una persona, quien agradecida le propuso que por sus servicios repartieran esa propiedad y tomara la mitad del predio:
– De ninguna manera –le expresó–. Págueme únicamente mis servicios, para que usted mismo tenga paz, tranquilidad y no se sienta mal, Pero de ninguna manera yo aceptaré hacerme dueño de lo que es su heredad.

Cómo urge que en el Perú asumamos dichos valores, que además son nuestra herencia genética si consideramos el ancestro de nuestra cultura de gran exactitud y moral, dueña de un código de honor y conducta incorruptibles.

5. Postulado o ideario de la Escuela Socialy de una educación con identidad
José Antonio Encinas no se preciaba sólo de que todos sus alumnos fueran profesionales de éxito, sino que todos hubieran abrazado la causa social y la defensa del indio en nuestro país.

Tales educadores son precisamente los poetas del dolor y de la grandeza del Perú, educadores de sus posibilidades y de la promesa de construir aquí una patria grande y justa.

Maestro es quien –nos lo dice él– articula escuela y comunidad, escuela y sociedad, quien asume el carácter social de la educación, la obra y la tarea colectiva. Es quien articula tiempos, espacios, ritmos, áreas del conocimiento. Es quien integra, socializa y hace posible el canto común de las distancias, trbajo mancomundado superando diferencias y hasta exclusiones ominosas.

Es quien preconiza que la gracia de ser maestros radica en reivindicar el mundo despreciado, socavado de las poblaciones en riesgo.

Que no sólo se necesita ser un buen profesor que desarrolla bien su curso o asignatura, que demuestra bien un teorema o explica diáfanamente la conjugación de un verbo, sino el que inspira para todos juntos trazarnos un destino de realización colectiva sobre la faz de la tierra.

Un maestro de niños tampoco puede dejar de ser un hombre de lucha, un guerrero, un militante, porque la esperanza –que es lo que siembra y debe cosechar un maestro– también se la conquista en las plazas y en las calles.

6. Cuenta Churata
Muchos pasajes, ideas y hasta juegos que el maestro Encinas desarrolló graficarían nítidamente la perspectiva de lo que podría identificarse como su concepción de la “Escuela social”.

De los muchos hay uno que quisiera referir, por ser quizá el más espontáneo, incluso hasta aparentemente desaprensivo y humilde, pero en el fondo de una gran significación.

Es una cuadro o instante que cuenta un alumno suyo de la Escuela 881 de Puno, que dirigiera durante cuatro años y que constituye una experiencia innovadora de extraordinario valor, pero además hermosa en su forma y contenido.

Relata Alejandro Peralta, reconocido también con su apelativo literario de “Churata”, que regresaban casi ya al amanecer por la meseta altiplánica, maestro y alumnos.

Como era su costumbre salían no de paseo ni excursión sino a clases que el maestro Encinas desarrollaba al aire libre, en las cumbres de los cerros o a la orilla de los ríos o habiendo avanzado a lo más profundo de los valles.

Los alumnos más fuertes habían avanzado en la noche lóbrega del altiplano cuando echaron de menos al maestro a quien divisaron, al chispazo de un relámpago, que venía muy atrás, lejos, pero a quien divisaron inmenso y agigantado.

Cuenta Churata en esta evocación que hizo varias décadas después, y sin detenerse mucho en relación a su significado, que al estar más próximo y a la luz de otros relámpagos notaron que él se había echado a los hombros al niño más desvalido, que lo traía a horcajadas en la nuca al débil, descalzo y desarrapado que quizá el frío de la meseta y lo agotador del camino le habían impedido caminar.

El maestro Encinas que no medía más de un metro sesenta aparecía por eso como un gigante. Pero algo más comprobaron: que con su vozarrón y viniendo desde lejos entonaba huaynos y taquiraris en quechua y aimara.

7. ¿Qué magia o significado tiene?
Cuenta que fue tal la fuerza, la verdad y la belleza de ese hecho, que de manera espontánea los mayores y fuertes buscaron a los más débiles y los echaron igualmente sus hombros, tal cual el maestro Encinas, uniendo sus voces al canto y a los himnos en las lenguas que entonaba el maestro.

Y así avanzaron, sintiéndose todos grandes, tanto los que cargaban a otros niños, a quienes les renacía una fuerza nueva, como los que iban en los hombros de los otros porque sentían bajo suyo la energía de la solidaridad como algo invencible.

¿Qué magia o significado tiene este pasaje suelto entre los muchos otros que se desprenden del ser y el sentir de la personalidad de este maestro legendario? Es significativo echarnos a los más débiles en nuestros hombros. Si la educación no sirve para eso, ¿para qué entonces educar? ¿Para la competencia? ¿Para ganar y desplazar al otro del camino? ¿Para tirar de codazos a los demás?

He allí la diferencia de lo que puede ser una educación competitiva a una escuela de inspiración social.
En este gesto natural, espontáneo e inconsciente está el sentido, la definición y el concepto profundo y genuino de lo que es educar socialmente. No solo allí está la visión o la misión de lo que es educación, cual es hacernos responsables del mundo en lo más débil, dolido y desprotegido que hay en él, cargarlo en nuestros hombros lo que está pendiente de solucionar.

Pero no con pesar ni con queja, tampoco con marketin o cara al público, sino con profunda y auténtica alegría, sin que eso constituya un lastre sino, como lo dice Churata, se agigantaban todos.

Hay otro rasgo en este pasaje, cual es que el maestro venía atrás, cerrando filas, el último porque vigilaba a quién más lo necesitaba y se retrasaba.

Otra faceta es la fortaleza, la imitación y el deseo de hacer lo mismo, de alinearse con la misma actitud, de no dejar que uno solo lo haga. Este convencimiento llano, voluntario; esta disposición en donde se resume una experiencia, una trayectoria y una vida.

8. Educación con identidad
Preconizó que nuestra cultura es el bien más preciado que nos honra, nos da lustre y enaltece; que incluso compensa y le da un ribete de gloria a nuestro ser en el mundo.

Que se sobrepone a la pobreza que nos acosa, ornándonos con un laurel de victoria cual es ser muy modestos en recursos materiales y financieros pero excelsos en nuestras glorias culturales.

Y así como lo predicó él mismo, él mismo es un símbolo de dicha promesa. Porque así como hay artistas y científicos representativos de nuestra esencia, hay también educadores, como él, que cultivaron una educación con identidad y una escuela totalmente inserta en su medio y en el compromiso social.

Él es el portavoz de un nuevo derrotero de la educación para el Perú, que propone que recogiendo el pensamiento de la cosmovisión del mundo andino es el modo de ser o hacernos universales.

De su vida y de su pluma es de donde podemos extraer las verdades o las certezas que necesita el ciudadano de nuestro país para ser el hombre nuevo que todos vivimos bregando para que aparezca, se eche a caminar y, al reconocerlo nosotros, lo abracemos, como dice Vallejo, emocionados, porque todos hemos clamado: Levántate, hermano.

9. Inspirados en el ideario Encinas
Es importante, en este contexto, reconocer, asumir y enarbolar –a manera de ideario– e inspirados en el maestro José Antonio Encinas, juntos y al lado de todos los maestros del Perú, los siguientes principios que derivan de su magisterio:

1. Creer que el fulgor de la verdad y su búsqueda apasionada no la perderá el hombre ni en el confín de los tiempos, que siempre la anhelará, y que ésa debe ser nuestra bandera y nuestra enseña.

2. Creer que el anhelo del bien y el peregrinar hacia las fuentes en donde el bien mora, debe ser lo que marque nuestra ruta, y que esa fuente está en el corazón del hombre. Y si la hemos perdido, hacia ella debemos orientar las velas de nuestras naves.

3. Creer que el temblor por la belleza que subyuga nuestro corazón no debe avergonzarnos, sino al contrario, descubrirnos el alma ante ella y declarar que amamos la poesía y el resplandor de la luna arrebolada en el horizonte.

4. Creer que la aspiración al silencio del recogimiento tampoco debe atribularnos, sino al contrario, conmovernos porque ello nos reclama a comprender otras cosas aparentemente incognoscibles.

5. Creer que la posesión del amor, o por lo menos tener los brazos y la mirada tendidos a aspirarlo y encontrarlo en nuestras vidas, debe formar parte de nuestras prerrogativas más hondas.

6. Creer que el júbilo, la exaltación, la felicidad que nos produce ver nacer, brotar, surgir y desarrollar la vida, debe formar parte de las experiencias más acrisoladas para el niño, el joven y el adulto.

7. Creer que la aspiración a la brega por defender los valores e instalarlos en donde no existen –valores como la identidad, la generosidad, la solidaridad– son de nuestra absoluta y total incumbencia y que tenemos que dar la vida en aras de su predominio y vigencia.

8. Creer que la vida heroica a la cual todos los hombres tenemos la aspiración de arribar, debemos asumirla plenamente, reemplazando con ella y cuanto antes, la otra vana y trivial, a fin de que esta yazga muerta a nuestros pies junto a los caballetes que soportan máquinas y artefactos a quienes hemos dado tantas prerrogativas para condicionar y hasta gobernar nuestras existencias.

9. Creer que la razón moral debe ser nuestro norte, nuestro derrotero, la fuerza que nos guía y alienta. Luchar por la justicia y equidad, porque no haya miseria, para que superemos la pobreza y sea vigente en nuestro mundo la libertad.

10. Creer que tenemos una patria hermosa como una espada en el aire. Que encontremos la hebra del heroísmo que tiene la labor o la misión de defenderlo, imbuyéndonos de la promesa total del Perú. Y que consagremos nuestra vida a defender nuestros ideales.

jueves, 29 de mayo de 2008

Paulo Freire‏


A seis años de su muerte

Homenaje al gran educador (1)


"La mejor manera de pensar, es pensar en la práctica"



Paulo Freire murió de una manera previsible: le falló su corazón, porque fue tal vez el órgano que más usó en su vida. La vida y obra de Paulo Freire son, fundamentalmente, un acto de amor a la humanidad. Su estilo de plantear, su manera de formular, su forma de dialogar estaban cargadas de una profunda pasión por la humanidad. Su actividad intelectual tenía como eje fundamental, una profunda búsqueda del pensar en la práctica con el ser humano, el pensar en la práctica educativa con una visión fundamental de la praxis humana.

En la vida y obra de Paulo Freire hay una profunda pasión por la libertad humana, y al mismo tiempo, una rigurosa y siempre renovada búsqueda de una pedagogía de la emancipación. En ese sentido, podemos decir que la obra de Paulo Freire va más allá de sus formulaciones, de sus escritos; está muy marcada por la singularidad de su conducta, del ejemplo que él nos da. A mí me gustaría decir incluso, que la profunda presencia de Paulo en muchos lugares está ligada a una característica fundamental que marcó toda su vida y toda su obra, y es su incesante búsqueda de la coherencia. Coherencia, que no es dogmatismo, sino la búsqueda de renovación de su pensamiento a la luz de los nuevos desafíos en los distintos tiempos históricos.

Intentando extraer algunos ejes temáticos de su vida y su obra, yo opté por seleccionar siete de ellos, partiendo del hecho de que siete es un número bíblico que representa a muchos, y escogí siete porque no podía hablar de todos.

1. Tal vez Paulo Freire sea más conocido por haber creado un método de alfabetización de jóvenes y adultos, de gran multiplicación en muchos países. Pero la vida y la obra de Paulo Freire fueron mucho más allá de la creación de un método de alfabetización. Paulo fue un filósofo de la educación que consiguió construir un cuerpo teórico y una pedagogía volcada a la práctica, volcada a la acción transformadora. Decía Paulo: "la mejor manera de pensar, es pensar en la práctica".

Su pedagogía siempre fue una pedagogía posicional, una pedagogía que rechazó la idea de neutralidad. Nos recordaba Paulo con mucha insistencia: "la neutralidad no es posible en el arte educativo y en el acto educativo. Mi punto de vista es, el de los excluidos, el de los condenados de la tierra".

2. Su pedagogía tiene que ver con la idea de cambio, eso se expresó en el título mismo de sus obras más completas, más amplias. A finales de los años 50 su primer gran obra "Educación como práctica de la libertad". En los años 60, exiliado en Chile, escribió "La pedagogía del oprimido". En el año 1992, haciendo una relectura de "La pedagogía del oprimido", escribió "Pedagogía de la esperanza". Y su último escrito, "Pedagogía de la autonomía". Libertad, visión de los oprimidos, esperanza y autonomía, son ejes fundamentales en la obra de Paulo, con un posicionamiento muy claro hacía el cambio y la transformación.

3. Paulo Freire propugnó desde el momento en que construyó su método de alfabetización, que el dominio de la palabra, el saber escribir, el saber leer, solamente tienen sentido si se traduce en una mejor lectura del mundo, una mejor lectura del contexto del hombre. Decía que en cierto sentido, la lectura del mundo precede a la lectura de la palabra. Si examinamos su vida, toda su obra, Paulo Freire siempre procuró renovar su lectura del mundo y autocriticarse en varios momentos. Diría que en sus escritos más recientes, Paulo Freire estaba expresando con mucha radicalidad -que él siempre pedía que no se confundiera con sectarismo-, su indignación frente a lo que él llamaba el cinismo de una ideología fatalista, que propugna que la realidad es así mismo, que los excluidos tienen que continuar existiendo, que la historia está en su fin. Paulo se manifestaba profundamente indignado con la hegemonía de esa concepción fatalista. El procuraba oponer a ello, la idea de la esperanza, de una utopía transformadora y posible.

4. Su preocupación de reafirmar su oposición a la ética del mercado que anula al individuo, y propone la homogeneización de todo. Y a esa ética opone la necesaria revalorización de los valores éticos del ser humano universal. De ahí con mucho destaque aparece la idea de solidaridad, la idea de la autonomía, la idea de la diversidad. Paulo insistía mucho en que una construcción democrática, una práctica educativa democrática, tenía que respetar profundamente la diversidad cultural, la existencia del otro, el respeto a la diferencia; y enfatizaba sobre una actitud en la construcción de esa ética del ser humano: la HUMILDAD. El decía: "cuando hablo de humildad, no estoy hablando de humillación, estoy hablando de una actitud fundamental de reconocer que en el otro hay siempre una parte de verdad, mismo en el otro contra el cual nosotros estamos luchando".

Hablaba, como consecuencia de esa actitud, de una necesaria tolerancia, que no es resignación. Una tolerancia que significa diálogo, que significa una actitud fundamental que estaba presente en toda la práctica cotidiana de Paulo Freire: "la actitud de escuchar, que está más allá de oír. Muchas veces nosotros oímos muchas cosas, pero tenemos que tratar de escuchar lo que el otro está queriéndonos decir, esto es una actitud fundamental", nos dice.

Finalmente, él hablaba de la perseverancia. Todo este proceso de construcción utópica, de construcción democrática, exige una profunda perseverancia para transformar las dificultades en un campo de posibilidades. Paulo decía: "la perseverancia hay que colocarla antes de una actitud, en la paciente impaciencia de transformar el mundo".

5. Una quinta característica es el tema del diálogo y del conflicto, muy presentes en la vida de Paulo Freire. Tanto el diálogo como el conflicto, él los propugnaba como factores constitutivos de un proceso de construcción democrática.

En uno de los muchos espacios de convivencia con él, fue cuando trabajamos juntos en la Alcaldía de San Pablo en la gestión de la alcaldesa Luisa Erundina. Paulo fue el secretario municipal de educación y siempre insistía, luego de haber enfrentado situaciones difíciles, de que el conflicto era inherente a la construcción de un proceso democrático. Que nuestra tarea fundamental era lo que él denominaba "pedagogizar el mundo", tornar el conflicto en un espacio de reconocimiento recíproco de confrontación, pero también de negociación.

6. Una sexta característica es la idea de que un proceso de construcción, de una ciudadanía activa, de la construcción de un sujeto histórico, sólo puede hacerse con una marcada intencionalidad educativa. Y ahí hay nuevamente una importante formulación muy dialéctica de Paulo: "si es verdad que la ciudadanía no se construye apenas con la educación, también es verdad que sin ella no se construye la ciudadanía", solía decir. O sea, él reconocía con mucha claridad los alcances y los límites de la educación.

7. Una séptima característica tiene que ver con la necesaria búsqueda de estimular en toda la práctica educativa el gusto por la curiosidad. Paulo entendía la curiosidad como el motor fundamental del proceso de construcción de conocimiento. Un conocimiento que nunca está acabado, y que se construye colectivamente. Esta idea fundamental está también muy marcada en el título de su obra llamada "Pedagogía de la pregunta". Decía Paulo que tal vez la manera más instigante de parte de un educador que pretende generar un proceso de construcción colectiva de conocimiento, es saber preguntar, es estimular el hábito de preguntar sobre la realidad.

En la última entrevista que concedió Paulo Freire a la TV Comunitaria de la Universidad Católica de San Pablo, se le preguntó qué opinaba sobre la marcha que había realizado el Movimiento de los Sin Tierra (MST). Paulo, con lucidez y al mismo tiempo con mucha ternura, respondió: "yo sueño con un país y con una América Latina donde se organicen muchas marchas: la de los sin tierra, y también la de los que no pueden ir a la escuela y la marcha de los que fueron a la escuela y fueron reprobados. La marcha de los discriminados, la de los que intentaron amar y no pudieron. La marcha de los que intentaron ser y no lo consiguieron".

Entonces homenajeando a Paulo Freire, propongo que nosotros continuemos mirando en su centro y organizando la marcha de aquellos que creen en la esperanza de transformar nuestro mundo. Muchas gracias.



Autor: Pedro Pontual
Presidente del Consejo de Educación de
Adultos de América Latina (CEAAL)



(1) Conferencia brindada el 16 de mayo de 1996, en el Foro Taller en homenaje a Paulo Freire, organizado por la Comisión de Derechos Humanos y Políticas Sociales de la Junta Departamental de Montevideo, la Red de Poder Local de CEAAL y Rel-UITA. Pedro Pontual fue amigo personal, compañero de trabajo y alumno predilecto de Paulo Freire.


sábado, 24 de mayo de 2008

LA EDUCACION EN LA GLOBALIZACION, EL NEOLIBERALISMO Y LA POSTMODERNIDAD

Ponente: Dr. Manuel Góngora Prado (*)

Resumen de Ponencia:

Todos, sin distinción de posiciones ideológicas y políticas, afirman que la educación está en crisis. Hay diferentes maneras de explicarla, al gusto y conveniencia de cada interés concreto de cada clase social. Aquí expongo el punto de vista de la ciencia que busca la verdad en los hechos, todo lo demás, es demagogia y mentira.

ROL DE LA EDUCACION EN EL SIGLO XXI
La educación, durante el desarrollo de la humanidad, siempre tiene una fundamentación filosófica y es un proceso generado exclusivamente por la conciencia social del hombre.
La educación, únicamente sirve para uno de dos propósitos: Es alienante o liberadora. No hay una tercera opción porque resulta ecléctica. Cualquier corriente pedagógica que hoy se enarbole persigue uno de estos propósitos.
La educación liberadora utiliza la teoría científica del conocimiento, interpreta el mundo real a partir de la actividad conjunta de los órganos sensoriales y del pensamiento abstracto del sujeto cognoscente, guiados por el método científico y con ayuda de medios técnicos.
Esta educación tiene como base la unidad de la fisiología cerebral y la psiquis de la conciencia humana. Este proceso sirve para la interpretación cabal de la realidad como abstracción teórica y, luego, busca la transformación de la misma realidad. De lo contrario la educación no sirve para nada.
La educación alienante se basa, filosóficamente, en el idealismo, la metafísica, el empirismo, el positivismo o neopositivismo, no toma en cuenta el sistema político social en su integridad, es unilateral, subjetiva, dogmática, a-histórica.
Consecuencia de esta alienación resulta una educación memorista, cursista, de culto al libro, sólo para aprobar, en definitiva sólo para el embrutecimiento del estudiante, porque lo aísla de su realidad histórica social concreta. No sirve para la transformación de la realidad.
La alienación de siglos, particularmente en el caso de América Latina, se patentiza en una educación que sólo sirve para asimilar conocimiento y luego transmitirlos. No sirve para el cambio, en ningún sentido, ni para el cambio personal ni para el cambio de la sociedad imperante.
Queda claro que la educación, en el Siglo XXI, es definitivamente una ciencia y, tiene el objetivo principal de capacitar al máximo nivel a los seres humanos para integrarlos al aparato productivo de una nación, este proceso se articula con la axiología, la ética y la moral para forjar al nuevo ser, particularmente en América Latina, con una visión eminentemente nacional, científica y democrática.
Hoy, este deslinde sobre la educación es vital para el futuro de nuestros pueblos porque nadie discute que el saber es poder. Desde la evolución de los seres humanos la educación ha jugado y juega un papel preponderante para el cambio de la naturaleza, la sociedad y el pensamiento humano.

¿QUIENES CONTROLAN LA EDUCACION Y PARA QUE?
Ahora, se presenta como una novedad o descubrimiento de los globalizadores que la educación juega un rol vital en el futuro de cualquier sociedad y por lo tanto no nos queda otro camino que hacer reingeniería, cambiar de métodos y técnicas para poder asimilar todos los conocimientos de ciencia y tecnología para salir del atraso y el subdesarrollo.
Se centran en nuevos métodos y técnicas pero, deliberadamente, en unos casos, ocultan su reaccionaria esencia filosófica, o en otros, el conocimiento y el aprendizaje lo distorsionan utilizando el vulgar empirismo, el eclecticismo y el pragmatismo.
Lo que no se quiere decir es quiénes controlan la educación y para qué fines la destinan.
Demás está decir que los dominadores del planeta y sus clases sociales decadentes sólo educan para defender el podrido capitalismo en su fase imperial, llegando a usar cotidianamente la mentira, el fascismo, la hermenéutica. Son dogmáticos e idealistas.

¿PARA QUE NOS EDUCAMOS?
O es una educación para continuar con la permanente dominación o la liberación de las naciones, para la recolonización de nuestros pueblos o para lograr su segunda y definitiva independencia, o es para el reciclaje de la ciencia y tecnología foránea y expansión de sus dominios o para una ciencia y tecnología que nos permita el uso científico de nuestros ingentes recursos naturales por nuestros pueblos y, por lo tanto, que sirva para construir el camino para la plena independencia económica social, política, cultural y educativa.
Nadie pone en tela de juicio los grandiosos avances de la Tercera Revolución Tecnológica-Científica, básicamente alcanzada por los países desarrollados, pero estos avances en las ciencias naturales y aplicadas, no se corresponden con el avance de las ciencias sociales, esta última en manos de los postmodernos, sólo sirve para generar mayor atraso y dependencia en los países subdesarrollados, ahora mal llamados ya no del tercer mundo sino del quinto mundo.

EL EMPIRISMO EN LAS CIENCIAS SOCIALES
Las ciencias sociales entre ellas la educación, ante el grandioso adelanto descrito, sufren, por parte de los globalizadores, neoliberales y postmodernos, una sistemática tergiversación de sus bases teóricas fundamentales, para buscar conducir a los países dominados, neocoloniales o dependientes al desconcierto, la mayor alienación, el embrutecimiento y el sistemático empirismo. Se trata, de apartar a nuestros pueblos del rol histórico que deben cumplir en su impostergable tarea de lograr su autonomía económica, social y política, con urgencia en este Siglo XXI.
En educación no se trata de discursar el cambio en abstracto, hay que darle direccionalidad, y esto no es posible si no se descubre la entraña y las teorías inhumanas que sustentan los dominadores, que en esencia buscan perpetrar la dominación de siglos porque caminan a paso firme y contra la historia, hacia la recolonización de los pueblos atrasados y dependientes. Este es el sentido de la reingeniería que buscan e implementan en todo el planeta.

GLOBALIZACION, NEOLIBERALISMO Y POSTMODERNIDAD
Entonces ¿quién es el globalizador principal?, es el viejo imperialismo odiado por los pueblos del mundo por su sistemática explotación; ¿qué es el neoliberalismo?, es el viejo liberalismo capitalista ahora en su fase monopolista y transnacional que lucha a muerte contra la propiedad social sobre los medios de producción; ¿qué es la postmodernidad?, es el viejo idealismo, la metafísica, el positivismo, el pragmatismo que distorsiona la concepción científica del mundo, del hombre, de la sociedad, de la naturaleza, con el objetivo preciso de evitar que los pueblos se concienticen y luchen contra la dominación más sofisticada y brutal del siglo XXI.
Estos tres primos hermanos: Globalización, neoliberalismo y post-modernidad, son una unidad concreta que abarca toda la base económica de los sistemas político-sociales del planeta y todas las formas de la conciencia social, entre ellas la educación.
La astucia de los dominadores radica en que han construido todo un sistema novísimo de nuevas formas de explotación y alienación, han puesto en marcha a todo un ejército de intelectuales, periodistas y gobernantes los mismos que practican a diario el cinismo, la mentira fundamentada como verdad, para un solo fin: Encubrir una sociedad podrida con lacras ancestrales basada en la dominación, la explotación, el saqueo de nuestros recursos naturales, el embrutecimiento sistemático, mostrándonos un paraíso inexistente. Esta es su entraña.
La globalización, el neoliberalismo y la post-modernidad abarcan a todas las sociedades del planeta, desde luego con consecuencias desiguales, los países de América Latina en particular, sufren las peores ruindades al punto de ver peligrar su propia existencia como naciones. El dilema tiene una única salida, o estos monstruos liquidan el futuro de nuestras naciones o el legítimo nacionalismo histórico de nuestros pueblos liquida a los globalizadores. No hay otra alternativa histórica.

POSTMODERNIDAD: RETORNO A LA CUEVA SALVAJE
El peor engendro de este monstruo de tres cabezas, es la post-modernidad porque su trabajo específico es en las ciencias sociales: La economía, sociología, psicología, filosofía, educación, antropología, ideología, política, religión, axiología, ética, moral, etc., no se salvan de sus elucubraciones seudo científicas, para buscar un solo fin: Confundir todo, subvertir la racionalidad y la lógica, negar la dialéctica materialista, al punto de dejar al ser humano en las sombras, la borrachera postmoderna deja al hombre sin alternativas concretas, caminan al eclecticismo, al empirismo y al pragmatismo total.
Si en la dominación colonial la consigna de los dominadores era "miente, miente, que algo queda", ahora en pleno siglo XXI se afirma con descaro "la verdad objetiva no existe, ésta se inventa y además, por conveniencia".
En las ciencias sociales ninguna ciencia en particular se salva, menos la Axiología o teoría de los Valores, afirman con desparpajo: "Cada perro sabe como mata sus pulgas", "sálvese quien y como pueda", "la mejor manera de vivir es haciéndose el cojudo".
El cinismo postmoderno niega la verdad objetiva y encima, la desacredita, concientemente niegan la verdad para pregonar el individualismo, el relativismo, el hedonismo, el subjetivismo y el empirismo extremo. Afirman con descaro que "cada uno formula su verdad basándose en su experiencia primaria".
Tergiversando la elemental racionalidad humana, sostienen: "Creer firmemente en algo y dar la cara por ella, buscando hacerla valer con la fuerza de la razón, es una actitud de fanáticos". "Para ser un buen demócrata hay que transigir y ser tolerante, hay que estar exonerado de valores y creencias", Rorty. "La verdad es experiencia estética, y las condiciones para decir la verdad es estar conforme", Vattimo. "La verdad objetiva no existe, es fruto de cada espiritualidad"; "Cada uno formula su verdad basándose en su experiencia primaria".

LOS NUEVOS CURAS POSTMODERNOS
¿Quiénes son los nuevos evangelizadores de estas patrañas en pleno Siglo XXI?, ya no son los curas, son los llamados catedráticos insuflados de académicos que dicen no hacer política, los gobernantes y politiqueros de turno en el planeta Tierra que se han dado el abrazo con el cabecilla de los diablos encabezados por Bush y sus halcones, los periodistas amarillos y vende patrias, principalmente.
Si se analiza la verdadera entraña de estos mafiosos, no son otra cosa que politiqueros fundamentalistas de extrema derecha, de mentalidad y acción fascista, totalmente antidemocráticos que venden a diario el futuro destino de nuestros pueblos hacia la libertad.

LA MORAL DE NUESTROS ANTEPASADOS
Decimos claramente que nada se salva de su manipulación. Ahora se sabe, basta este ejemplo, que los principios morales de nuestros antepasados basados en "Ama Llulla" (no seas mentiroso), "Ama Kella" (no seas ocioso), "Ama Suhua" (no seas ladrón), fueron burdos inventos de cronistas al servicio de los colonizadores españoles. La verdad es que nuestros principios morales consistían en: "Llankay" (trabaja), "Yachay" (edúcate), "Sonkoy" (amor).
Sin duda que la educación, en este Siglo XXI, tiene que cumplir un rol emancipador, libertario, para otra cosa no sirve educarnos. Es en este terreno que se dan las nuevas confrontaciones estratégicas contra los dominadores de siempre.
Eduquemos al pueblo, con la ciencia, con la verdad, con la moral de nuestros ancestros y tendremos, pronto, una Patria verdaderamente libre de toda dominación.

¿QUE HACER?
En este contexto general, ahora, táctica y estratégicamente ¿qué hacer?: Toda la humanidad del planeta debe practicar la Filosofía Política; usar el pensamiento crítico; organizarse, organizarse, organizarse en todas las células de la sociedad y; crear con trabajo de hormigas prensas alternativas que el pueblo necesita para liberarse históricamente de los ancestrales dominadores de ayer y ahora. No hay otro camino.



Perú, Lima, 12 de mayo del 2008


(*) Profesor Principal de la UNMSM

LA TERNURA DE RODRIGO MACHADO


Cuando Javier Heraud cruzó el Rubicón, dispuesto a tomar el cielo por asalto, pasó a llamarse sencillamente Rodrigo Machado. Con este nombre de combate, adoptado en La Habana, en julio de 1962, dio inicio a una nueva etapa de su vida, la de la entrega total al llamado de su pueblo y de su tiempo, ideales limpiamente incubados desde que siendo un adolescente le dijera al mundo que su cuarto era una manzana con sus libros/ con su cáscara/ con su cama/ tierna para/la noche dura/, y donde el poeta, como lo dijera también, podía reir al lado de César Vallejo y mirar la luz eterna de Pablo Neruda.

Para Rodrigo había llegado el momento de dejar el arma de la crítica poética para asumir sin vacilaciones la crítica de las armas. Su amor por la vida y los seres humanos, que cubre cada una de las lineas de su creación lírica, lo llevaba de esta manera al máximo nivel de expresión de su conmovedor humanismo sin par. Atrás quedó el futuro personal tan prometedor, la casa, la familia, los amigos, los premios, los halagos. Ahora había que apostar no solamente por la vida de un hombre, sino por la vida 'de muchos hombres, de un pueblo, de muchos pueblos'.

Esa extrema sensibilidad, aunque ahora a otro nivel, era en esencia la misma que el poeta había cultivado desde su niñez, en el amor filial a sus padres y hermanos, y que mantuvo siendo ya Rodrigo Machado, el guerrillero que marchaba al monte dispuesto a hacer de la poesía, 'redención del hombre'. Porque en el fondo, como él mismo se lo dijera a su madre: 'yo siempre seré el niño a quien tú tuviste en brazos aunque haya crecido por este tiempo que avanza y destroza los años, pero no los recuerdos...'.

Este cariño hacia los suyos se mantendrá inconmovible. Las comunicaciones que el poeta envió a sus padres y familiares cercanos desde que dejó el Perú, dan fe de esa ternura que se acrecentó con el tiempo, la distancia y la nostalgia. En sus Poesías Completas sólo se publican 23 de ellas, 16 cartas y 7 postales, todas desbordando un inconmensurable afecto. De éstas citaremos algunos párrafos, muy ilustrativos:

A su madre, doña Victoria Pérez Tellería:

¿Qué hacen todos? ¿Se sientan a la mesa a la una, almuerzan, comen uvas, cada uno se va a trabajar? ¿Tú tan cariñosa y buena madre como siempre?... Mamá, papá, hermanos, yo los quiero a todos y ojalá ustedes no se olviden de mi.(Camaguey, 12 de abril de 1962).

...hoy es el día de la madre y no sucede como en 19 años anteriores:corriendo a tu cama con algún regalo para darte, o un beso, o un corazón pegado en cartulina.

...Por eso he querido esperar hasta hoy, segundo domingo de mayo, para envolver, para poner en un papel todo mi corazón de hijo agradecido, todo mi corazón anhelante de cariño, y enviártelo en este día que está lleno de recuerdos infantiles y hogareños para mi. (La Habana 13 de mayo de 1962)

Estas Navidades pienso en ti, recordando que es la primera vez que no la pasamos juntos. Pero mi corazón está con Uds. más que nunca. Sepan que junto al árbol de tantos años, junto al hogar mío y nuestro, elevo mi agradecimiento, mi cariño, mi recuerdo. Que esta navidad me recuerden todos como a ausente momentáneo de la cena pascual. (La Habana, 25 de diciembre de 1962).

A su padre, don Jorge Heraud Cricet:

...Yo sé bien que tú no me formaste para que yo fuera rico...sino para que fuera honrado y consciente, y yo creo ser ahora honrado y consciente conmigo mismo, y eso es lo importante

En fin, papá, escríbeme pronto y a menudo, cuéntame de ti, de tu salud...nosotros constituimos la familia más hermosa de la tierra y creo sinceramente no hay una como la nuestra, ¿no te parece? Y que aunque yo esté lejos estoy dentro de Uds. y con Uds., en el almuerzo, y en todos los actos de la vida. (La Habana, 16 de mayo de 1962).

No faltando en las misivas las referencias a su abuela o a sus hermanos, en particular a Gustavo, el menor, al que dejó seguramente con pantalones cortos:

Todo el día pienso en Uds. en tí, en mi papá, en mis hermanos y en especial en el Gustavito. ¿Cómo le va en el Colegio? Me imagino que estudiará mucho, ya está en 2º de primaria. ¿Sigue creciendo? Cuéntame de él mamá, con detalles y dile que me escriba. (La Habana, 16 de junio de 1962).

Los restos de Rodrigo Machado, lo dijimos en una envío anterior, descansan hoy en el cementerio Jardines de la Paz, en La Molina, tras 45 años de haber permanecido en Puerto Maldonado. A su madre, de 96 años, le corresponde la perseverancia y el tesón por ver de regreso a su retoño, a sus hermanos, el calor filial con que lo recibieron y lo volvieron a sepultar, ahora en cenizas, mientras con la emoción en la piel leían los párrafos de aquellos poemas que por primera vez escucharon en la voz del hermano ausente...

jueves, 22 de mayo de 2008

SALUDO Y PERSPECTIVAS

INSTITUTO DEL LIBRO Y LE LECTURAINLEC DEL PERÚ

DÍA DE LA EDUCACIÓN INICIAL

25 DE MAYO

LA EDUCACIÓNINICIAL EN LA VISIÓNDE LA ESPERANZA


Danilo Sánchez Lihón


"El arte hace surgir la verdad". Martín Heidegger

A. FORJÁNDOSE LA EDUCACIÓN INICIAL EN EL PERÚ

1. La Educación Inicial en el Perú

La Educación Inicial como primer nivel del sistema educativo peruano data su existencia a partir de los años 70 del siglo anterior, oficialmente a partir del año 1972, cuando se la instituye en el marco del proceso de la Reforma de la Educación Peruana.
Sin embargo, en su devenir hay varios otros hitos notables que abarcan desde un poco antes del inicio del siglo XX, cuando Juana Alarco de Danmert en 1896 funda la Sociedad Auxiliadora de la Infancia que incluía entre sus fines el establecimiento de centros educativos para niños de 0 a 7 años.
Elvira García y García, cofundadora de la citada Sociedad, establece en 1902 el primer kindergarten para niños de 2 a 8 años, anexo al Liceo Fanning para señoritas, inspirada en la doctrina y el ejemplo del pedagogo alemán Federico Froebel.
Las hermanas Victoria y Emilia Barcia Boniffati al regresar de Europa crean en 1921, y en Iquitos, el Kindergarden Moderno.
Aproximadamente, diez años después, el 25 de mayo del año 1931 Victoria y Emilia Barcia Boniffati, son llamadas por el Presidente Augusto B. Leguía para fundar oficialmente el Primer Jardín de la Infancia en el Perú, dirigido a niños de 4 a 5 años de edad, fecha que se conmemora como el Día de la Educación Inicial en el Perú.

2. Primer Nivel del Sistema Educativo

El primer Jardín de la Infancia funcionó en el Parque La Mar de Lima, con carácter público y gratuito, bajo el lema “Todo por amor, nada por fuerza”, institución educativa que después ha pasado a ser el centro de aplicación del Instituto Nacional Superior Peruano de Educación Inicial, INSPEI, que funciona hasta la fecha en el distrito de San Miguel.
Pasó una década para establecerse, en 1939, la primera Escuela de Preparación para Maestras Jardineras de la Infancia y tres décadas para que funcione el Instituto Nacional de Especialización Infantil (1959), con el propósito de preparar maestras que trabajen en dichos centros, con el objetivo de: favorecer el proceso de socialización, formación de hábitos y el desarrollo de habilidades y destrezas que preparen al niño para su ingreso a la etapa escolar.
Ya en marzo de 1972 el gobierno militar y reformista de aquella época promulga la Ley General de Educación que considera a la Educación Inicial como el Primer Nivel del Sistema Educativo Peruano:
“...destinado a crear las condiciones indispensables para el desarrollo cabal de las potencialidades de los niños, fortaleciendo la necesaria acción familiar y comunitaria, complementándola cuando sea deficiente y supliéndola cuando falte”.

3. No se limita a los aprestamientos
Esta nueva concepción corrige la inmediata anterior que visualizaba la Educación Inicial como antesala y preparación para la Educación Primaria. De esta nueva iniciativa son propulsores Carlos Castillo Ríos y Walter Peñaloza Ramella, quienes elaboraron el proyecto innovador en el marco de la nueva concepción de la educación que conducían a nivel general los maestros Augusto Salazar Bondy y Emilio Barrantes Revoredo.
La estructura del nivel de la Educación Inicial recién concebido en aquella fecha es el de Cunas, para niños de 0 a 3 años de edad y Jardines de Niños para los infantes de 3 a 5 años. Complementario a esto se consideran los Programas No Escolarizados, PRONOIs, dirigidos a padres de familia y comunidad.
La Educación Inicial pasa, de este modo, a tener su propia filosofía, sus fines autónomos, así como sus objetivos y metodologías específicos, contando además con sus propios fundamentos científicos y doctrinarios, sustentados principalmente en las investigaciones del biólogo y psicólogo suizo Jean Piaget, cuyos estudios esclarecieron las fases y características en la adquisición y construcción del conocimiento en niños y adolescentes.
No es el nivel de la Educación Inicial –así se lo reconoce en la Ley General de Educación, se lo siente y se lo vive– una antesala ni una preparación para la Educación Primaria, mucho menos se limita a los aprestamientos para la enseñanza en las diversas disciplinas del conocimiento; ella ha alcanzado a tener cabalmente una deontología propia, un ideario y un destino que la ennoblece y la hace genuina.

4. Ser comprendidos, amados y felices
La Educación Inicial ya desde su institucionalización definió lúcidamente sus propios fines. Concordante con eso, es importante que la articulación con los primeros grados de la Educación Primaria no sea una presión o una imposición de esta última buscando que se adapte aquella a requerimientos y exigencias que no le son pertinentes.
Es bueno dedicar la mayor atención y desvelo a la educación en los primeros años de vida del niño puesto que ya está demostrado fehacientemente que las capacidades que se desarrollen y los aprendizajes que se construyan en este período son básicos y decisivos en lo que se refiere a la conformación de la sensibilidad, inteligencia, comportamiento y valores.
Si queremos construir desde el cimiento hasta la cumbrera y no desde la teja airosa para después tratar de colocar la piedra fundamental que sostenga la casa, hay que atender lo que nos recomendaba desde hace ya más de 200 años Juan Jacobo Rousseau cuando decía que “el niño tenía derecho a ser entendido antes que ser educado”, a lo que nosotros agregaríamos que a ellos les asiste, de igual modo, el derecho mayor e inaplazable a ser comprendidos, amados y felices.

5. La educación de la esperanza
La educación tiene que alcanzar una comprensión amplia tomando como base el ser integral del niño. Una visión cabal de lo que es educar es no reducir esta función a la mera adquisición de conocimientos sino a un desarrollo global de la persona humana, dando debida atención a la psicomotricidad, al ámbito socioemocional e intelectual del educando.
Ha de fundarse en los saberes y quereres más íntimos y genuinos del niño, que se proyecta al padre, a la casa y al hogar; que reeduca a la familia, ligando además en ese cometido la actuación de otros sectores del acontecer social como son: salud, vivienda, comunicación, medio ambiente y otros.
Es importante en esta visión de la educación ubicar la formación del niño en el espacio del juego, de la recreación artística, de la comunicación en general, reivindicando el gesto, la caricia, la palabra, el abrazo.
De este modo se ha fundando en nuestro país la educación de la esperanza, de la entrega generosa, del anhelo de un destino superior, donde se manifieste y florezca el canto a la vida, con la pujanza y vitalidad de un profesorado con dedicación y entusiasmo por su trabajo en el aula y por proyección a la comunidad en el ideal de instaurar una sociedad solidaria.

6. Del arroyo que se hace río, laguna o mar
La clave de todo este accionar radica en el amor y en la esperanza que han de hacerse vigentes en la relación maestro niño, amor y esperanza que lo alientan y animan todo, fuerzas que todo lo integran, redimen y proveen de sentido.
Porque, así como en el vino, por más que mezclemos infinidad de veces el zumo de la vid y la miel que lo componen no obtendremos este producto si no se sigue el proceso de su decantación, así también en educación y en la vida, no alcanzaremos a dar el temblor, el pálpito ni el pulso primero y final que nos abra paso al sentir y al despertar, si no alentamos en el fondo de su milagro y prodigio el amor y la esperanza.
Proposición es esta que se alinea en el ser y el anhelo de una educación de la ternura, de la flor que presiente el fruto, del arroyo que se hace río, laguna o mar que concilie con el milagro de la vida, de su trascendencia y su intrínseca eternidad.
Unos versos del poeta Yogonanda, encuentro de mucha significación y precisos para el contenido que hoy nos ocupa, cuando dice:
A través de estambres y pistiloshas creado tú las flores puras.Y a través de mis padres y su uniónmi cuerpo has modelado con dulzura.Así como tú eres el creador de todo bienasí lo somos nosotros también.Enséñanos a crear, sagradamentesantamente, ya sea nobles hijoso nobles ideas.


B. IMPORTANCIA DE LA LITERATURA INFANTILEN LA EDUCACIÓN INICIAL

1. Formar niños capaces de asumir su destino
Vivimos en un mundo signado por cambios continuos que son efecto del desenvolvimiento de los procesos culturales, sociales y políticos, como también del avance cada día más vertiginoso de la ciencia, la técnica y la economía.
Teniendo como referencia el desafío de construir en nuestras sociedades la modernidad con identidad, con sensibilidad y valores, es importante estar debidamente atentos a todas las corrientes de pensamiento y acción y ser conscientes de los problemas y, sobre todo, de cuáles son las soluciones adecuadas a fin de resolverlos afianzando lo humano y sus dones primigenios.
Ya es bastante conocido por todos que la base del desarrollo del ser humano se gesta en los primeros años de vida, cuya atención y cuidado se confía y corresponde al nivel de la Educación Inicial, que abarca "cunas" y "jardines", que atienden las etapas en que el niño traza y cimienta su personalidad integral.
Es por eso que siempre será fundamental dedicar a este nivel los mayores esfuerzos, proyectando la suficiente visión en el trabajo y la entrega que permita que ella se concrete y plasme, visión que permita esclarecer criterios en cada uno de los aspectos que lo influyen y condicionan para que sean siempre coherentes con la realidad.
Asimismo, es deseable en los maestros y maestras imbuirse de los mejores atributos que nos permitan acertar en el ideal de formar niños capaces de asumir su destino y realización en el mundo con lo mejor de sus potencialidades.

2. El rol de la literatura infantil
El rol de la literatura infantil ha sido revalorizado para la educación en general, porque pasó mucho tiempo en el cual se juzgó que para educar debería hacerse únicamente sobre bases objetivas, en función de las cosas, las técnicas, los servicios y el mundo concretos.
Pero ahora incluso la ciencia a través de la psicología revalora la emotividad para el desarrollo integral de la personalidad y la psicolingüística advierte acerca de la importancia del desarrollo del lenguaje para tener pensamientos, acciones conscientes y socialización.
Si a ello se suma que las investigaciones en general revelan lo imprescindible de la fantasía para el desarrollo de la inteligencia humana, es entonces cuando la concepción y reflexión educacional vuelven los ojos para reconocer la importancia del juego, de la imaginación y la creatividad, terminándose por otorgar un valor enorme a la literatura infantil en la Educación Inicial.
Porque ocurre que cuando el niño grita «¡los caballos!, ¡los caballos!», para nosotros los adultos es algo corriente y de rutina, en donde ya no ocurre nada de extraordinario ni del otro mudo. Sin embargo, para los niños no solo es un mensaje y un grito de júbilo, sino que es toda una jornada de honda poesía que los niños la viven de manera intensa y real.
Así, un niño travieso puede jugar a fantasear a ser el niño travieso, el otro que es tranquilo y ordenado puede hacer de sí mismo todo un personaje mágico, porque entre realidad y fantasía para ellos no hay diferencias ni fronteras y la superponen de manera habitual.

3. Mundo objetivo y fantasía
Sin embargo, en algunos ámbitos el debate aún sigue siendo vehemente de si la educación puede y debe valerse de la fantasía, de la imaginación y de la subjetividad para educar o si, más bien, debe orientarse únicamente por incorporar a su programa lo práctico y lo técnico.
El contrapunto es pues entre fantasía y realidad, para dilucidar lo cual vale preguntarnos: ¿Cuál es la realidad válida para la educación como para la literatura?, porque felizmente no estamos en el ámbito del Banco de Reserva, ni en el del Ministerio de Economía, aunque cada vez pareciera que las recetas para la educación emanan incuestionables desde esas oficinas, sino que felizmente trabajamos en escuelas y colegios y nuestro desempeño se ubica en el campo de la educación.
Entonces ¿cuál es le relación entre realidad y fantasía? Porque ¿es acaso la realidad sólo la social, histórica y circunstancial? ¿Es la realidad solo la exterior, concreta y a flor de piel? ¿Es únicamente realidad la cotidianeidad ordinaria, la tecnología o la guerra?
Ni siquiera para todos los adultos, sean hombres o mujeres, no es esa la realidad sino otra, o al menos es esa parcialmente, complementada con otras facetas de la realidad integral, entre las cuales están las ilusiones, los proyectos, los sueños y anhelos tan legítimos y propulsores tan igual o mayormente fuertes que la realidad opaca de las cosas.

4. Por encima de las limitaciones
Para los niños: acaso ¿es esa la realidad con la cual vamos a trabajar? ¿Es esa realidad la que vamos a reconocer como única y principal para los niños? Si fuera así: ¿dónde queda entonces la subjetividad, el alma y el anhelo de mejorar y hasta de ser otros en relación a los atrasos que debamos de dejar atrás? ¿Son enemigos la fantasía y la vida? ¿Son irreconciliables el mundo de la calle y los sueño, o más bien hay que juntarlos”.
Hay sobre todo ello, más allá o al fondo de esa realidad opaca la otra esencial, uno de cuyos ámbitos es la fantasía, la misma que no trasgrede la realidad, sino que surge de ella, la involucra y quizá la representa mejor. De allí que no hay fantasía incoherente, por más que lo parezca, con la realidad objetiva; no hay fantasía que sea espuria o hija ilegítima de la realidad social que la contiene y la implica.
En este contexto, la literatura en muchos casos es más verdad que la historia de los hechos, fastos y acontecimientos. Y es porque ella se ubica en un terreno atemporal y por encima de las limitaciones espaciales; es decir no tiene tiempo y no tiene espacio contingentes que la relativicen.
La utilización de la literatura infantil en las aulas no será posible si no hay docentes preparadas, imbuidas de un buen y vasto conocimiento sobre este tema y que permanentemente estén actualizándose en nuevos enfoques, materiales y estrategias.

5. Espacio donde florezca el canto a la vida
Postulamos pues que la literatura infantil debe ser el punto de partida, el centro y el hilo conductor e integrador de los diversos aprendizajes en el nivel de la Educación Inicial, hecho que impondrá un mayor acercamiento a planteamientos y metodologías que trabajen con la oralidad literaria, constituida por el acervo de nanas, cantilenas, jitanjáforas, mitos, leyendas, cuentos y poemas que circulan en forma oral.
Para Jean Piaget, cuyo pensamiento es dominante ahora en los planteamientos de diseños curriculares y que se adoptan en los sistemas educativos de los diversos países de América Latina, la vida afectiva y la vida cognitiva son inseparables habiendo un paralelismo entre las emociones y los procesos de inteligencia racional.
Pero es más, hay plena coincidencia con Lev Vygotsky en el sentido que el lenguaje que el niño procesa desde sus primeros días y meses de vida es la base para el desarrollo de ideas, que a su vez es la base para el desenvolvimiento de acciones conscientes que, a su vez es la base para la socialización.
La literatura se sitúa ahora como un contenido esencial, al advertirse que la ciencia siempre va detrás de las intuiciones, las visiones y profecías de la literatura. Y es así: el arte, frecuente y constantemente, nos da arquetipos y modelos que están en ese punto intermedio de seres ideales pero a la vez con mucha inserción en lo concreto.
Pero, además, el don de la literatura es que es íntima y personal, vertiente donde el hombre puede reconocer y sentir con la mayor intensidad su individualidad. Siendo así, sin embargo, ella alcanza la proyección a lo universal. Por esta razón el arte está en el término medio entre lo real y lo fantástico, entre lo objetivo y el mundo del ideal, al cual todos debemos aspirar.

6. Trasponer la puerta e ingresar a la literatura
La literatura es el arte de lo particular que se universaliza, porque cuando el conocimiento se desprende totalmente de lo privado e individual, se hace entonces ciencia, es decir pasa a ser un principio universal totalmente despersonalizado. Y, a la vez, cuando un hecho cobra únicamente un valor individual queda en la esfera de lo universal y privado.
Pero cuando contenidos muy personales, por acción del arte, valen para muchos, se traspone la puerta y se ingresa a la literatura, la misma que se sitúa entonces en una línea de tensión entre lo que es íntimo pero a la vez con el poder de ser universal:
La Educación Inicial es todavía, y felizmente, una educación en correspondencia y fidelidad con la vida, el juego, la alegría y la ternura. Hagamos por eso que en ella el gozo de existir se afiance y sobresalga frente a la presión y al dominio de lo cognitivo en el cual luego es atrapado el conjunto del sistema educativo en general.
Abramos el espacio social en donde se manifieste y florezca el canto a la vida. Y prosperen entonces las actividades artísticas, las manifestaciones culturales y sea una fiesta el acto supremo y humano que es educar. Gabriel Celaya se expresaba así:
Educar es lo mismoque ponerle un motor a una barca...Hay que medir, pesar, equilibrar......y poner todo en marcha.

Pero para eso uno tiene que llevaren el alma un poco de marino...un poco de pirata, un pocode poeta... y un kilo y mediode paciencia concentrada.Pero es consolador soñar mientras uno trabaja, que ese barco, ese niñoirá muy lejos por el agua.Soñar que ese navío llevaránuestra carga de palabrashacia puertos distantes,hacia islas lejanas.

Soñar que cuando un día estédurmiendo nuestra propia barca,en barcos nuevos seguiránuestra barca enarbolada.